-No te vayas-murmuré dubitativa ya que era la única compañía que tenía, sin contar a los pájaros, ni a los lagartos, ni a demás animales que no me iban a ayudar porque no era la Sirenicienta, una popular protagonista de un cuento para niños.
-¿Por qué no? He de ir a buscar tu brújula o sino permanecerás en este lugar por un largo tiempo. Además, estás mirando mi tridente como si te lo fuera a clavar en el estómago.
Ups, me pilló.
-Bueno, es como si me traigo un cuchillo afilado y lo tengo en la mano como si nada, sabiendo tú que yo soy tu enemiga maximus.
-Tú puedes tenerme miedo, pero yo también puedo tenértelo a ti.
-¿Y eso por qué?
-Pues porque ambos somos enemigos, nosotros tenemos una idea de vosotros, y vosotros de nosotros.
-¿Y por qué no me matas?
-Porque tú no me has hecho nada. Porque no voy a matar por matar.
-Pero mi especie mató a la tuya.
-Y la mí a la tuya, así que estamos a mano.
-¿Entonces no eres una bestia despiadada y cruel?
-No.
-¿Me puedo fiar de ti?
-¿Y yo de ti?
-Sí.
-Sí-respondió él.
-¿Quién es tu padre?
-Pez Vader.
-Muy bromista.
-Muy normal-respondió con tranquilidad, y, la verdad, le tuve que dar la razón ya que mi pregunta no era la más normal.
-No, ahora en serio.
-Neptuno.
-¿Neptuno? ¡Peoro si sois muchos! El tío tiene mucho vicio-bromeé con una sonrisa.
-Oye, no te pases-dijo con sus ojos amarillos, que por cierto me daban mal rollo, mirándome.
-Perdón, perdón.
Recorrí su cuerpo con mi mirada, fijándome en uno de sus brazaletes. Tenía una brújula.
-¿Crees que puede servirme?-la señalé.
-No. Cada mundo tiene la suya.
-Pero pensaba que vuestra tecnología era mejor.
-Y yo que vuestra inteligencia era mejor.
-Para con las pullas.
-Igualmente.
-¡Son opiniones!
-Pues lo mío también.
Bufé irritada. Empezábamos con buen pie.
-Soy Delia-dije suspirando-. Soy Delia y quiero que me saques de aquí.
-Yo soy Eider.
-Encantada.
-Igualmente-me tendió su mano mojada, libre del tridente, y más arriba enseñaba un tatuaje de dicho objeto, para invocarlo.
Se la estreché. Quizás no eran tan malos después de todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario